'Poner' el Belén en casa (Marian Roales)

          En mi pequeña obsesión por visitar Belenes, me dediqué una tarde a recorrer las casas de convecinos a los que, como a mi, les gusta este pequeño arte y entretenimiento. 

            Hice varias visitas, lo que es habitual cada año, así como recibirlas. A los que nos gusta 'poner e Belén' también nos gusta abrir las puertas a quienes deseen verlo, tomar ideas unos de otros, aportar sugerencias,...

            Son muchas las composiciones que fotografié, de todos los estilos y posibilidades, pues no todos tenemos en casa el sitio que nos gustaría, pero, como veréis, hay opciones para todo tipo de espacios. No me voy a enrollar con explicaciones, pues todos tienen una historia detrás: figuras heredadas, algún regalo especial, hechas a mano,...

Si tenéis poco, pero poco espacio, podéis poner alguno como este que tiene Mª Ángeles, para el que basta una estantería o, como en este caso, un piano.

Una opción muy original y artesanal es este que tengo en la cocina, hecho de punto con una base de cartón forrado, que además puede ser una experiencia intergeneracional diverida abuela-nietos.

También ocupando poco espacio tenemos este, de inspiración rusa que pone Sara cada año. 

Es además muy fácil de guardar de un año para otro.

Y, en el colmo de los colmos, una última opción. Solo necesitarás un trocito de pared, algún cuadro o espejo que puedas descolgar durante unos días y colocas una composición tan original como esta que me mostraron en Revellinos.

Sin embargo, en tan poco espacio, no le falta un solo detalle.

           Si dispones de un poco más de espacio, una pequeña mesa o una esquina, puedes colocar el portal como lo hacen 

Belén, 

Isabel, 

Mª Jesús,

o Rosario. 

Incluso puedes tener a los Reyes, como Fati en el suyo.

o como Nieves, en este maravilloso conjunto, procedente de Tanzania, que heredó de su abuela.

            Finalmente, si tienes un espacio suficiente o paciencia para reorganizar durante unos días la casa, puedes colocar todo el pueblo de Belén, con sus animalitos y artesanos.

De este modo han hecho Eva, aprovechando una esquina de su salón, 

o Bárbara, al calor del radiador, 

Nuria, Sonia y Luis Alberto sacándole partido a la esquina del pasillo,

Teresa haciendo sitio entre las plantas, 

para colocar este original conjunto hecho a mano, que absorbe las miradas de todos los niños y los no tan niños,

Vale moviendo todo el salón para ponerlo sobre la mesa, 

igual que Asun, que almacena durante unos días en la cochera hasta los cuadros.

El último que os muestro es el mío, para cuyo montaje nos vemos obligados a hacer un traslado de muebles por toda la casa cual procesión de Jueves Santo.

         Un pequeño consejo, si tenéis niños o prevista su visita, armaros de paciencia, pues todo su afán es reorganizar rebaños y agrupar personajes, en definitiva aportar un poco de vida al conjunto y convertirlo en un juego.

¡Espero que hayáis pasado 
unos felices días!